sábado, 12 de diciembre de 2015

El Vecino 3

Se levantó como pudo ya que al parecer no estaba tan curado como yo pensaba, me tomó de la mano e hizo ponerme en frente de él. Comenzó por besarme nuevamente pero esta vez fue mas corto. Me sacó el poleron que tenía puesto, luego me desabrochó mi cinturón. Tenia una especie de ansiedad y nerviosismo, se notaba en sus ojos brillando.

-Alguna vez lo has hecho con un hombre? -le pregunté-
-Es mi primera vez, de hecho no se lo que estoy haciendo.

Siguió desabrochando el boton de mi pantalon, yo por mi parte me saqué las zapatillas y lentamente bajó mi pantalos y junto con él, tambien bajó y puso su cara frente a mi boxer. Olió por encima y al parecer le gustó.
Se levantó nuevamente y me sacó la polera. Se alejó un poco de mi (quedé solo en boxer y calcetines) y sin dejar de mirarme comenzó a quitarse la ropa.

Al parecer no estaba tan curado como lo pensaba.
Cuando quedó solo en ropa interior se acerco a mi y comenzó a besarme. Ese momento era completamente excitante, jamas pense tener sexo con este weon ni siquiera me imaginé en algun momento entrar a su departamento. El ventanal estaba abierto por lo cual entraba la brisa de la madrugada que rosaba nuestros cuerpos.
Cada vez comenzó a besarme con mayor intensidad. Su paquete luchaba contra el mio. Lo bueno es que ambos vestiamos boxer apretados por lo cual sentíamos el roce de una forma espectacular.
Bajó su boxer y junto a eso su pene quedo completamente descubierto, a mi parecer (ya que la belleza es totalmente subjetiva) era perfecto. Solo un poco de bellos en la parte superior del pubis, un poco recortados pero el resto lampiño completamente. Lo mejor de todo esto es que nunca habia estado con un mino lampiño. Tocar su piel era realmente un placer, ya habia sacado mi ropa interior por lo cual nuestros miembros se rozaban y frotaban intensamente. Su pene estaba algo mojado, su cabeza estaba llena de liquido preseminal por lo cual con uno de sus dedos lo sacó y lo llevó a su boca (esa wea me dejó a mil por hora) despues de eso me dio un beso un poco salado y espero pero no dejaba de ser exquisito.
Despues de un rato de estar besandonos me dio la vuelta y comenzo a besar mi espalda, el weon sabia como manejar toda la situacion perfectamente. Me preguntó al oido -puedo lubricarte con mi lengua para penetrarte mejor- yo con gusto le dije que si. El vecinito bajó por mi espalda, y parece que se marió un poco porque estuvo a punto de caerse, ahi me di cuenta que estaba medio curado aun.
Me hizo un beso negro como los dioses, yo me retorcia de gusto y se notaba que este weon era maestro en temas linguísticos ya que sabia hacerlo muy bien. Subió nuevamente y me abrazó comenzando a puntearme. En ese momento ya estaba un poco dilatado asi que no fue tanto trabajo que me penetrara. El tamaño de su pene era perfecto en relacion a mi cuerpo. Su ancho hacia que gozara con cada embestida y el largo hacia que mi prostata se excitara cada rato un poco mas.

Cuando se cansó por estar tanto rato de pie le dije que descansara un rato, que se recostara ya que ahora me tocaba a mi hacer la pega. Abri su entrepierna mientras se recostaba y comence a hacerle un rico sexo oral, era demasiado rico el weon!. Posterior a esto bajé hasta su lampiño ano y sin pensarlo comence a dilatarlo. Cuando llevaba un rato asi me dijo que parara un rato ya que en cualquier momento se iba cortado, que nunca le habian hecho eso y que era muy rico. Me paré y puse sus ricas piernas en mi hombro y su trasero redondo frente a mi pene. -Que vas a hacer? Me preguntó un poco asustado. -Tranquilo le dije, al principio molestará un poco pero te gustará.
Comence a entrar de a poco. Mi pene estaba lubricado hace rato de tanta exitacion. Entro la cabeza y de a poco entro completo. Su cara de placer en ese momento era lo maximo y comencé las embestidas en ese culito exquisito que se hacian mas fuertes con el sonido de sus gemidos. Me dijo antes de acabar, quiero que acabemos juntos. A lo que yo acepte sin problemas. Nuestros cuerpos estaban sincronizamos y en el momento que lo llenaba de mi semen, sus abdominales quedaron completamente cubiertos de el suyo. Quedé rendido pero antes de cualquier cosa hice algo que me encanta. Pase mi lengua por sobre su guatita y le tomé el sabor a su espersa leche, despues de esto trague un poco y le di un beso devolviendole el semen a el. -Me encanta esto- me susurro al oido. En gustos no hay nada escrito.

Pase al baño a limpiarme y al salir el esta a recostado en la cama cubriendo con un brazo su cara.
-estas despierto? Pregunté.
-Si pero quiero descansar, te pido un favor? Me dijo.
Te puedes ir? Quiero estar solo.

En ese momento entendí que lo pasamos muy bien pero le vinieron los tipicos arrepentimientos del "hetero" post sexo gay.

Continuará...

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