De Guardia en “el flanco Mote”

Primero que todo me gustaría presentarme ante todos ustedes, mi nombre es Carlos, en la actualidad tengo 23 años pero lo que me dispondré a contarles ocurrió cuando yo tenía 19 años y hacía mi servicio militar obligatorio. Vivo en la ciudad de La Serena en el sector de la Antena. Aclaro desde ya que hasta ese entonces no me definía ni homosexual ni bisexual, era heterosexual a cagar, o eso era lo que yo creía…

Para comenzar, me gustaría contextualizar mi entorno para que puedan entender la situación. Provengo de una familia no tradicional, si bien es cierto que conozco a mis padres, nunca viví con ellos, siendo criado bajo el alero de mis abuelos maternos. A mis 16 años comencé a andar en malos pasos a causa de mis malas amistades, lo que me llevo a ser un joven rebelde y con muchos problemas, tanto con mi círculo familiar como también con mis amigos y en un par de oportunidades con la autoridad. A mis 18 años salí de cuarto medio de un liceo técnico y fui llamado a hacer mi servicio militar obligatorio, hecho que para mí era la peor sanción dado que no quería estar encerrado, cuento corto, por obligación quedé y me asignaron al Regimiento Arica, en la ciudad de La Serena.

Los primeros meses fueron terribles, quería desertar pero nos explicaron que desertar era la peor opción y que si lo hacíamos quedaríamos en una situación de desertor y un sinfín de cosas más. Me arme de fuerzas y cumplí con el periodo obligatorio, pero existió una motivación para aquello y que es el centro de la historia.

Muchas veces nos toca hacer la denominada “guardia” la cual puede ser de noche o de día ya sea en garrita de acceso o en flancos específicos del regimiento. Para los que no cachan el regimiento Arica tiene 4 flancos, el flanco norte que da a la bajada del cementerio, flanco sur que da al lugar donde está el mástil de la bandera, el flanco este que queda cerca del casino y el flanco oeste que queda en un sector conocido como “el mote”. Éste último lugar es conocido por que es ultra mega piola, nunca pasa nada, no se ve nada y está rodeado de árboles, por ende, la garita de vigilancia queda inmiscuida en lo oscuro y se presta para que los pelaos de guardia puedan tomar o fumar algo. Cuando a uno le tocaba esa posición daba por hecho que era noche de diversión.

En ese periodo estaba entablando amistad con un weon que venía de Valdivia que se llamaba Kevin, conocido como el rusio Kevin, un weon que el corte sopaipa ya lo traía hecho sin necesidad de pasar por sanidad jajaja, su lenguaje delataba el tipo de entorno al cual pertenecía y su coa figuraba como un indicador de flaite al 90%. La situación es que con este pelao nos empezamos a llevar súper bien y entablamos una amistad de webeo que superó los límites permitidos dentro del Ejército. El Kevin medía como 1.78 mts, delgado pero tonificado, sus calugas bien marcadas y un pecho bastante tonificado, por lo que se veía lampiño tanto de brazos y de piernas, una cara bastante lisa y perfecta y lo que más me llamaba la atención, una dentadura casi perfecta con unos labios ni tan gruesos ni tan delgados, ojos verdes intensos lo cual lo hacía salir un poco del típico prototipo de soldado chileno jajajajaja.

Como el loco era de Valdivia, en nuestros días de civil se iba a mi casa y en general salíamos juntos y nos llevábamos la raja, empezó a quedarse a dormir en mi casa para no quedarse en el regimiento los días libres. La relación de amistad fue creciendo de a poco hasta un día nos pidieron hacer guardia de fin de semana, que en otras palabras es el aburrimiento máximo porque no hay casi nadie en el regimiento, algo nos animó cuando nos aviaron que estaríamos en el flanco “el mote”. Como yo sabía que “el mote” era piola, me atreví a cargar 4 petacas con whisky y el rusio por las suyas escondió una botella llena en las cercanías. No se pregunten como las ingresamos, solo diré que cuando uno le cae bien a algún cabo, las cosas se dan mas fáciles jajajaja.

Yo tenía 4 petacas de Whisky preparadas para esa noche, sin ninguna intención, nada premeditado, y empezamos la guardia conversando de cosas banales sin importancia alguna, entre tanta conversación ya llevábamos las 4 petacas abajo, no se nos notaba el entonamiento, por lo cual seguimos conversando y fumando como si nada pasara, en eso veo que el rusio se va cerca de un árbol y saca una botella de wisky nueva y yo le pregunte que mierda, y él me dijo que se había preparado jajajaj de la guardia pasó a una real tomatera, sabiendo que nos estábamos arriesgando a ser marginados de por vida o a recibir las penas del infierno, epro como era fin de semana, todo ok.

Seguimos tomando y la conversación empezó a subir de tono, empezamos a hablar de minas, de sexo, zorras tetas y muchas weas que me excitaron a mil. Para los que no cachan, los pantalones militares son anchos y no da mucho para la imaginación y dado que son sueltos ayudan bastante cuando uno anda caliente evitando la carpa jajajaja. Bueno, estábamos en eso cuando se da la siguiente conversación:

Rusio: oye hermano sabi que me calenté con la conversa men.

Yo: ajajaj weon caliente de mierda ¿de cuándo na de na?

Rusio: puta men, hace como 5 meses con una minita y manopla hace como 1 mes, estoy más acumulado ctm

Cuando dijo eso, tomó su mano y se resfregó su paquete que ya se veía erecto a cagar.

Yo: mala weon, yo también ando re acumulao hace como un mes na de na con nadie ni con la mano jajajaja.

Rusio: si hubiera una mina o cualquier hoyito no la dudo dos veces weon pero me vendría cortao al toke hermano.

Yo me puse a reir y no comenté nada, puesto que para ese entonces la conversación no daba para seguir. Pero el rusio siguió insistiendo con la wea hasta que me dijo una wea que me dejó marcando ocupado por unos instantes…

Rusio: oye hermano, te tinca si nos hacemos una mano amiga?...

Silencio ….

Yo: ¿pero esa wea no es de maracos?

Rusio: Na que ver hermano, voh dale no más y concentra la wea y cero rollo hermano.

Yo nunca pensé que decir que “sí” causaría una noche de pajas mutuas dentro del regimiento.

Cuando le dije que le diéramos, jamás pensé en alguna conducta homosexual, lo vi por un lado de una paja mutua como muchos weones se han hecho en la infancia y no por eso son homosexuales, pues comenzamos a tocarnos cada uno por su lado, pasaron como 10 minutos así y el weon comenzó a acercarse más y más hasta que quedaron nuestros muslos muy juntos, tan así, que se traspasaba el calor de nuestros cuerpos. En un momento, sentí que su mano comenzó a recorrer mi pierna derecha, hecho que no sé por qué me calentó mucho, acto seguido, hice lo mismo pero sin pensar en nada, solo dejándome llevar por el momento y la curadera. Pasaron como 10 minutos más y mi pico estaba que reventaba y la cara del rusio se notaba en un nivel de excitación a mas no poder, en ese momento no sé por qué lo hice pero toqué con mi mano su pene por sobre el pantalón, y uffff fue una sensación que jamás había vivido, fue un escalofrío de calentura, pasaban por mi cabeza muchas weas, sentir ese pene duro bajo el pantalón fue un pre-orgasmo militar máximo, me sentía en la gloria, no sabía por qué pero estaba a full, yo cacho que si en ese momento me corrían una paja, me venía cortado al toque.

Al momento de poner mi mano sobre su pene, el rusio hizo lo mismo y seguimos así hasta que la calentura no dio para más, él me bajó el cierre y tomó mi pene (aprox 18 cm no muy grueso, me hago un rebaje) que ya estaba bastante húmedo por la calentura, y yo tomé el de él que yo creo que debe haber medido muy similar al mío, con pelitos claros, más delgado que el mío pero estaba extremadamente duro, parecía un palo y que estaba muy muy muy mojado por el precum. Fue tanta la excitación en ese momento que sentí como daba unos pequeños gemidos de placer y mojaba aún más su pene. Por inercia pasé mi dedo pulgar por su cabeza toda humeda y sentí como el weon se retorcía de excitación, soltaba unos quejidos muy piolas y mojaba aun mas.

Nos pajeamos mutuamente durante aproximadamente 15 minutos más, tomábamos whisky cada cierto tiempo, y de repente me abraza y quedan nuestras cabezas tan juntas que logre sentir su aliento alcohólico, me llevo a ponerme de pie y quedamos frente a frente, y me dice:

Rusio: hermano me voy a venir cortao… hermano… y me abraza fuerte

Yo: ctm toy apunto weon dale…

Rusio AHHHHHHH….

Y sentí como su leche salpicó toda mi polera blanca, la chaqueta de guardia y mis bellos púbicos. Fue tanto moco que realmente me di cuenta que estaba acumulado, su cara de placer era tremenda, una wea que nunca había visto ni en las porno.

Yo casi al mismo tiempo me vine de la misma forma, mojando todo su slip, sintiendo por dentro un escalofrio, una calentura, una pasión y una wea inexplicable.

Ocurrido esto, inmediatamente nos miramos frente a frente, y puffff ocurrió algo que jamás se me había pasado por la mente, el rusio me chantó un beso con lengua con cuatica y yo de la pura calentura se lo devolví. Nos seguimos besando tan calientemente y tan borrachos que nuevamente sentí que el rusio se empezaba a excitar, yo en ese momento también sentí como mi pene se ponía durísimo. Seguimos besándonos y nos corrimos nuevamente la paja de pie eyaculando en el mismo lugar y posición.

Pasaron como 5 minutos y como pudimos nos arreglamos y seguimos conversando como si nada hubiera pasado. Mis manos estaban llenas de semen y sus manos igual, tabamos entero de mokeados…pero estábamos tan curados que ni nos dimos cuenta. Pasaron unas horas y ya estaba amaneciendo, se acercaba el relevo, a eso de las 8 llegó un cabo segundo con 2 pelaos que no ubicaba mucho y nos mandaron a dormir.

Pasaron los días y con el rusio no hablamos de lo ocurrido, es más, nuestra relación se estrechó aún más, a tal nivel que comenzamos a vivir un cuento totalmente diferente dentro del regimiento.

Episodios como este se repitieron como 3 veces dentro de un periodo de 2 meses, y fue ahí donde me di cuenta que tal vez lo nuestro no era solamente calentura, si no que había algo más, una especie de atracción mutua, una complicidad de hacer lo prohibido en las fuerzas armadas y en lugares que subían a mil nuestra adrenalina.

Pasaron los meses y se cumplió el periodo obligatorio, jamás se supo ni se sospechó nada de lo que ocurría, sin embargo en la última semana ocurrió un hecho que me dejó helado. Estábamos en el casino comiendo y apareció el cabo que hacía el relevo en la guardia. Me dijo que quería hablar con migo y bueno yo pensé que quería un favor o alguna wea, acto seguido, me llevó a la sala de municiones, lugar donde se guardan los fusiles y otras cosas, cerró la puerta y me dijo, “yo no soy weon pelao ctm, pelaos como voh no me engañan, llevo casi 10 años entrenando la disciplina militar y no me hacen weon. Acaso crees que pasan piola con el rubio del sur”…CHAN CHAN CHAN

Lo que sigue será la segunda parte y final de éste relato.

Espero sus críticas ¡!! Saludos contertulios ….