La adolescencia, Año 2016 II

El primer mes del 2016 no tuve contacto con José como dije, y el segundo solo fueron esas interminables conversaciones que teníamos por WhatsApp. No lo vi mucho, porque tuve que trabajar, estaba ocupadísimo además con los trámites para matricularme en la universidad y todos los días hacía algún trámite para conseguir los papeles para las becas. Y también los de la matrícula.

En esas conversaciones que tenía con José, obviamente llegaba el momento de que me contaba sus aventuras con mujeres. Siempre que me contaba algo así me sentía muy mal, porque lo deseaba, si bien es rico y todo el sexo no era mi prioridad, pero me daba un poco de envidia como había gente que podía tener a una persona tan hermosa. También me daban rabia las weonas que lo hacían sufrir, que jugaban con su corazón. No sabían a la hermosa persona que tenían al lado, no conocían su vida, sus gustos, sus costumbres, nadie conocía a José mejor que yo. Me preguntaba muchas veces, por qué no podían aprovechar lo que tenían?, y más aún… porque no hacían feliz a José?, si yo no podía hacerlo, al menos que otra persona lo hiciera…

En una de esas lagunas emocionales me dio por pelarme, me dio por salir a buscar a cualquier persona que agarrara a besos, no me importaba nada, quería volver a sentir lo que era que alguien pusiera su boca en la tuya, expresando un poco de deseo. No diré que soy un rompe zorras o rompe oyos, pero aún así me he comido a uno que otro mino y a una que otra mina.
La encontré en Facebook un día viernes de marzo, se llamaba Maritza, 18 años, era bien linda, más alta que yo, pelirroja, pecosa, ojos café, no tenía un cuerpo voluptuoso como para decir “OH MIJITA RICA” pero a mí me gustaba por lo menos como lucía.

La agregué y le hablé, me saludo afectuosamente y me la traté de jotear con muy poca esperanza. Cosa que resultó. Le decía cosas como “que linda tu foto”, o cuando me mandaba un audio “que linda tu voz” (la verdad si era linda su voz) o cuando tenía la oportunidad de decirle algo romántico lo trataba de hacer.
Ese fin de semana estuve muy confundido. Mi corazón estaba fijado en José, pero yo buscaba a Maritza, quería sacar las ganas de dar ese amor que estuvo reprimido por tanto tiempo. Pero me equivoque…

En tantas de las conversaciones que tuve con ella, dijo que quería probar la marihuana. Entonces le dije que nos juntáramos el lunes en el centro de la ciudad donde ella vivia, y yo la llevaba a un lugar piola para fumar…

Ese día no fui muy arreglado, no quería impresionar a nadie. Solo hice lo básico, me bañe como corresponde, me eche un poco de desodorante y solo fui a ver a Maritza, aunque no quería hacerlo, sentía que estaba haciendo algo que no quería, pude haber dicho que no, pero solo fui. Me sentía como un sonámbulo que solo caminaba a pesar de que no quería hacerlo, solo caminaba, solo conducía, solo me dirigía hacia donde tenía que ir.

Al conocerla, me decepcioné inmediatamente. No quiero ser discriminador, ni menospreciar como la gente vive su vida. Era otaku, (onda china, japonesa, monitos animados y volas) y hablaba como weona, su voz era linda pero hablaba como weona, tenía que decirlo.

- Yo: Donde vamos al final?
- Maritza: Vamos a mi casa, queda un poco lejos de aquí sí. Pero hay una plazita un poco bien piola donde podemos fumar
- Yo: Emm, ya po vamos… ojalá te guste lo que tengo
- Maritza: Eto… (SI CTM, DIJO ETO) que tienes??
- Yo: Cogollo del weno weno, lo compré para año nuevo me dijeron que estaba guardado de la cosecha del 2015 y la verdad es que me mando a recorrer el universo entero
- Maritza: Oh cool!, ya vamos!

En el camino, solo me hablaba cosas de su vida. Las weas que hacia con los monos animados, las weas que veía en internet, los amigos con los que se juntaba a disfrazarse de los monos estos. La verdad yo no la pescaba mucho. Solo miraba la ventana de la micro y pensaba “Que chucha estoy haciendo con esta pseudo-loca, bueno, si solo vamos a fumar, no debo pensar tanto”, también hablaba con José por el WhatsApp, le estaba contando mi gran “hazaña” con la Maritza. Mientras él solo me decía “ponele el pico”, desconocía toda posibilidad en que yo estaba pensando más en él en ese momento que en el montón de cháchara que me hablaba la mina.

Llegamos a su casa, y bajamos a la plaza donde ella me había dicho. La verdad no era una plaza, era como un pequeño mirador con vista al mar. En eso le enseño a como fumar, mientras prendía el pito, y cuando suelto el humo sin darme cuenta veo a Maritza darme un beso.

Correspondí el beso, no dijimos nada, yo estaba desanimado, e incluso pegado por el pito. Ella fumaba y fumaba mientras que yo también y quedamos súper volaos, ella estaba cagá de la risa, yo estaba mirando el mar. Era maravilloso ver ese oleaje, en ese cielo azúl, me sentí libre por un pequeño momento.
Como todo volao, me dio hambre y la Maritza me invitó a su casa a comer porque estaba sola. Llegamos y efectivamente no había nadie, me dio un par de panes y me preguntó si quería escuchar música un rato en su pieza.

Puse West Coast de Lana del Rey, estaba en la tremenda atmosfera… en eso siento que la Maritza con lo que su cuerpo le permitía, viene a besarme, beso que correspondí. Comenzó a besarme el cuello, me quitó la polera, y en ese momento me dice:

“Tiremos?”

Me quedé pensando, a mí nunca me fue muy bien con las minas o con los minos, si me comí con un par de personas, pero yo era virgen. Mi ideal siempre fue entregarme a la persona a la cual yo estuviera enamorado, que en mi caso era a José, más que por ser José, mi ideal siempre fue la primera vez que tuviera sexo fuese enamorado. Pero ahí pensé, “tengo 18 años, nunca me ha pasado algo como esto, y ya es tiempo de que comience a explorar mi sexualidad. No quería hacerlo, pero también pensé “He estado esperando mucho tiempo a José, quizá cuanto más tenga que hacerlo?”

Entonces la besé apasionadamente, le quite toda la ropa, me quité la mia. Y aplique lo que había visto en unas vagas películas porno hetero. Me la chupó como las diosas, Y yo también hice lo mismo con menos experiencia si, además de que estaba bajo los efectos de la Marihuana, el placer era el doble. Cuando la empecé a penetrar, me costó un poco agarrar ritmo a la situación y cuando lo logré no sé cómo los vecinos no me dijeron nada cuando salí de la casa porque gritó como loca. Pero, yo no lo disfrutaba, pensaba en la rabia que tenía, en que quería sacar ese dolor de alguna forma y la verdad es que a pesar de mi poca experiencia, fui lo más bruto con ella, se la metía fuerte, rápido, no dominando el movimiento pero yo solo metía la wea, cambiamos de posición y se puso a saltar sobre mi pene como loca y le pegaba nalgazos, pero con mucha rabia, no era deseo lo que estaba expresando, estaba liberando rabia, y al parecer le gustaba. La volví a cambiar de posición y la puse patitas al hombro, y seguí metiéndosela bruscamente, la wea se me llegaba hasta salir y me daba lo mismo, yo le daba y le daba y le daba. Al mirarla a los ojos, volví a tierra, y sentí como mi corazón me dijo “Tu no la amas a ella”, y paré, saqué mi pene, me pajié y terminé la wea…

- Maritza: Cómo estuvo?
- Yo: Bueno
- Maritza: Pero era tu primera vez po, eto.. solo dirás “bueno”?
- Yo: Estuvo muy bueno Maritza
- Maritza: Hmm, bueno supongo que ahora debes irte?
- Yo: La verdad sí, es un poco tarde se nos fue harto tiempo tirando, debo irme a mi casa
- Maritza: Vives muy lejos?
- Yo: Si, dos ciudades más allá, debo tomar el tren
- Maritza: Ok iré a dejarte a la micro que pasa por la estación
- Yo: Ok

En el transcurso hacia la micro, solo pensaba en la wea que había hecho, necesitaba escaparme un poco de lo que había hecho. Porque todos dirán, weon no hiciste nada malo, pero yo estaba enamorado, no quería hacerlo, no quería entregarme a alguien que no quería, tenía miedo y mi miedo se hizo realidad…

Le dije que me dejara hasta fuera del pasaje solamente, y yo iría a tomar la micro. En eso prendí un pito, y al menos el oscuro pasaje me ayudó a consumirlo rápidamente, me fumé un cigarro y estaba en otro universo, me eché gotas en los ojos y tomé la micro…

Me senté en el último asiento, el más alejado de toda la gente que va compartiendo, o escuchando música. Tomé mis audífonos y puse la canción más triste que tenía de Lana Del Rey: Old Money, sobre todo necesitaba esa triste frase del puente, esa que decía

“Y si tu vienes, yo correré hacia ti, correré hacia ti. Si solo cambias de opinión, yo iré, iré e iré hacia ti”

Necesitaba llorar y lo logré en ese momento, me daba lo mismo la situación o el lugar, estaba arrepentido, siempre supe que íbamos a terminar tirando, porque me tiraba tallas relacionadas con eso y lo pensé con anterioridad y no quería!!, pero en ese momento de debilidad, desde que salí de mi casa, desde que la vi, desde que seguí caminando con ella, compartí el pito, su cama y mi cuerpo, estaba confundido, estaba tratando de sacarme del corazón un sentimiento que no lo podía sacar por lo menos con esta persona, pero algo si sabía y es que yo no quería dejar de amar a josé, no quería sacarme ese sentimiento del corazón. Sentí que la cagué, sentí que no debió ser correcto y eso fue por lo siguiente…

Al llegar a mi casa la Maritza me mandó un mensaje…

- Maritza: Estuvo increíble benja, a pesar de que hayas sido virgen no se notó mucho
- Yo: Jaja, muchas gracias
- Maritza: Que bacán que te encontré, eto… pensé que nunca encontraría a nadie en mi vida que me tratara como lo has hecho tú, y además que me diera el mejor sexo de la vida
- Yo: Maritza, debo hablar contigo sobre eso…
- Maritza: Que?, tienes algo?, no me asustes…
- Yo: No, no es sobre eso
- Maritza: Entonces, dime
- Yo: Primero quiero pedirte perdón, solo te busqué porque estaba triste, no quiero que quizá te enganches de mí, y que después sufras, esto no es tu culpa y no va en mis principios hacer sufrir a la gente.
- Maritza: Buuu osea, que me dijiste que era linda, que te agradaba solo porque querías tirar conmigo y era?
- Yo: No, la verdad no tenía pensado tirar contigo… es que yo… yo estoy enamorado de otra persona, y tú no me gustas…
- Maritza: Pero, si no te hubiese gustado, ni siquiera se te habría parado…
- Yo: Estaba volao, para mí es como viagra esa wea
- Maritza: Osea, que solo me usaste
- Yo: No, quería pelarme solamente, quería olvidarme un rato de él…
- Maritza: Él!, eres gay?
- Yo: No, soy bisexual
- Maritza: Y… de quien estás enamorado?
- Yo: De mi mejor amigo…
- Maritza: Entonces… quieres que no te hable?
- Yo: Podemos ser amigos?
- Maritza: Está bien!

Entonces, pensé que di por terminado el tema de Maritza. Pero todo fue empeorando, su realidad era casi igual a la mía, pero si yo estaba afectado por mis emociones, las de ella eran el triple. Se quedó con la imagen de que yo me interesé en ella, y la verdad es que sí, aunque no quería hacerlo igual lo hice, igual me interesé en ella, pero solo para pelarme no más y en este caso un calentón que después se olvidaba, pero en ella no resultó, ella quería ser mi pareja a pesar de que no me conocía y yo tampoco la conocía a ella. A mí no me interesaba, no me hacía sentir nada, ni siquiera una cosquilla en la guata. Le dije muchas veces que yo estaba enamorado de José, y no quería intentar nada con nadie, si yo estaba enamorado de otra persona, no quería que sufriera…

El pato y la Magda decían que podía estar desechando una gran oportunidad para poder amar, pero yo no sentía nada por ella!!. Y es más, a medida que la fui conociendo, menos me fue gustando porque no era el tipo de persona que yo quería para mi vida, y nadie ha podido comprender eso. Incluso ustedes lectores, también pensaran…

“Este weon ha webiado mucho tiempo, no se valora, no se quiere a sí mismo y le llegó una oportunidad para encontrar el amor y no la aprovecha!”

Pero yo, no siento nada por ella, y yo estoy enamorado de mi mejor amigo… es solo eso lo que puedo decir y aunque la gente no quiera entenderlo…

En cuanto a José, me felicitó por haber perdido la virginidad, estaba más hombre para él xD. Nuestra amistad siguió igual que siempre y entré a la universidad.

Mi vida había cambiado cuando entré ahí, dejé atrás esa humilde escuela con muchos momentos de mi vida que atesoraré, el más importante fue que en esa escuelita, a la que en un principio no quise ir, conocí al amor más grande de mi vida, conocí a un gran compañero para mi vida, al mejor amigo que pude haber tenido en la vida hasta ahora, me dolía dejar el lugar que me hacía recordar tantos almuerzos compartidos con José, o tantos recreos que molestábamos a cualquiera, o los rincones en los que nos escapábamos de las clases para conversar…

Comenzamos a salir más este año, cada sábado lo acompañaba a comprarse ropa, lo ayudaba a vestirse, le llevaba las prendas, parecía su señora en realidad xD, y yo me webiaba solo con eso… Un sábado que lo acompañé, me regaló un chaleco, era carísimo, no diré el precio. Pero ningún amigo me había hecho un regalo así y la verdad es que no me lo esperé, cuando me lo dio recuerdo que me dijo

“Te mereces este regalo y más, siempre estas acompañándome, siempre estás aconsejándome y consolándome, me da lo mismo gastar lo que gaste, total tengo ropa nueva y tu también!”

Ahora ese chaleco no me lo saco nunca…

Parte 1: https://relatosflaitecitos.blogspot.cl/2016/06/la-adolescencia-ano-2012-primera-parte.html

Parte 2: https://relatosflaitecitos.blogspot.cl/2016/06/la-adolescencia-ano-2013-i-segunda-parte.html

Parte 3: https://relatosflaitecitos.blogspot.cl/2016/06/la-adolescencia-ano-2013-ii-tercera.html

Parte 4: https://relatosflaitecitos.blogspot.cl/2016/06/la-adolescencia-ano-2013-iii-cuarta.html

Parte 5: https://relatosflaitecitos.blogspot.cl/2016/06/la-adolescencia-ano-2014-i.html

Parte 6: https://relatosflaitecitos.blogspot.cl/2016/06/la-adolescencia-ano-2014-ii.html

Parte 7: https://relatosflaitecitos.blogspot.cl/2016/06/la-adolescencia-ano-2015-i.html#comment-form

Parte 8: https://relatosflaitecitos.blogspot.cl/2016/06/la-adolescencia-ano-2015-ii.html

Parte 9: https://relatosflaitecitos.blogspot.cl/2016/06/la-adolescencia-ano-2015-iii.html

Parte 10: La mandé el 30 - 06 - 16

Próxima: Parte 12: La adolescencia, capítulo final