Mi mejor amigo, el “hetero”?

Hola, los que les voy a contar ahora es algo que de verdad me ocurrió cuando fui a un evento de anime. Me presentaré, mi nombre es Andrés todos me dice Andy, vivo en la sexta región, tengo 17 años, tirando para los 18. Antes de que empiecen a leer quiero aclararles que me tratare de ser lo más detallista posible, no quiero hacer el relato por partes pero si me extiendo mucho, lo máximo que leerán serán dos partes. Empecemos.
Como todo otaku, para nosotros es normal estar todos los días encerrados en nuestras casa leyendo manga, viendo anime, jugando videojuegos, entre otras cosas, las pocas veces que ven nuestras caras son cuando tenemos que ir al colegio, U, IP, preus y sobre todo los eventos de anime, donde toda la gente como yo, muy antisocial, se reúnen y nos transformamos en una personas muy sonrientes y lo más raro… sociables.
En uno de los tantos eventos que he asistido, conocí a mi gran y mejor amigo, Fernando, él es un tipo alto 1.85 para ser exactos, trigueño, delgado, tiene un cuerpo muy poco definido, osea no tiene las calugas de un fisicoculturista pero tiene unas calugas que sobresalen muy poco y eso me gusta y me vuelve loco,es simpático cuando quiere serlo y no muy simpático cuando no.
Ese día del evento cuándo conocí a Fernando hicieron un concurso sobre darle un beso, piquito, topon a otro hombre (yaoi), éramos 10 hombres incluyendo a Fernando, 5 parejas de hombres por un sólo premio, dos gorros de pikachu, las reglas eran claras 15 segundos sin separar los labios y el mejor beso se llevaría los premios, yo en ese entonces me creía hetero y según yo ese beso no cambiaría en nada mi condición, así que le di no más, subimos las 5 parejas, a mi por cosas del azar y del destino me tocó como Fernando, ya habíamos hablado su resto así que se podría decir que ya no era un total desconocido.
-Andy, yo soy hombre y me gustan las minas, así que noté pases rotos conmigo porfa- me dijo con una risa en su cara muy picara.
Lo único que hice fue reírme fuerte por sus palabras - Feña, no te preocupes, yo también soy hetero- le dije sin meditar mucho mis palabras.
El concurso comenzó todos los concursantes estaban en su cometido mientras Fernando y yo hacíamos lo mismo, era mi primer beso y lo más raro era besar a un hombre que acababa de conocer hace menos de dos horas. Pasaron los 15 segundos del concurso y ganamos.
Como era y soy pendejo no le pedí algún medio de contacto. El evento terminó y no lo vi más.
Pasaron las semanas y veo una solicitud de amistad en mi Facebook, era él, ese lindo rostro de 16 años, me había mandado una solicitud de amistad, la cual acepté gustosamente.
Con Fernando hablamos de todo por dos años y es así como se convierte en mi mejor amigo un hermano de madre distinta.
(Sorry por la extensa intro xD)
(Aquí es donde comienza el relato)
Con Fernando hablamos de todo y cuando digo todo es todo, por esa razón él sabe que nunca he tenido sexo ni menos estado pololeando con una mujer, pero no sabe el porque, el cree que es porque soy inmaduro para la edad que tengo , pero la verdad es que tengo miedo de lo que siento, me siento atraído por los hombres y las minas pasan sin pena ni gloria por mi vida (sé que ustedes lectores me dirán que es normal eso, pero también tienen que encontrar verdad a lo que digo), muchas personas dicen que si eres gay estás cagado de la cabeza, me da miedo decirle a Fernando que la persona que me confunde es él, pero tarde o temprano lo va a saber. Esa es la decisión más importante que tome, contarle.
Llamado telefónico
-Wena Andy, como estas- dice inmediatamente después de contestar el teléfono.
-Hola Feña, estoy bien y tú?- respondo muy triste y con un nudo en la garganta.
-Andy, que te pasa?- pregunta
-Feña, necesito hablar contigo, hoy en mi casa- le digo, sin tratar de de ocultar que me pasaba algo.
-Oka, como a qué hora te gustaria? Pero si quieres voy ahora, hoy no tengo clases- responde tranquilo.
-Ok, te espero- mientras recorría una lagrima por mi mejilla -Te quiero- y colgue el telefono.
Fin llamado telefónico
No pasaron ni 5 minutos y Fernando ya estaba en la puerta de mi casa diciendo aló, por suerte en mi casa no había nadie y podríamos hablar tranquilamente.
Le abro la puerta de la casa y ahí estaba Fernando, polera blanca, jeans, azules, el pelo lo tenía como despeinado como si se hubiera bañado recién (eran las 10 de la mañana de un dia lunes)
Entró a la casa se sentó en el sillón estuvimos mucho tiempo en silencio, yo no sabia como decirle que todo el tiempo q he estado solo es porque él me atrae.
-Andy, que pasa?- dijo Fernando, interrumpiendo mi concentración.
-Feña, lo que pasa … es que … aaaaah- mientras me agarraba la cabeza con las manos -no se como decirlo-
-Andy, tu y yo somos mas que amigos, casi hermanos, yo se que te pasa algo, hace tiempo que lo sé, pero no sé , no sabía cómo preguntarlo-
-Feña, no es muy simple decirlo-
-Mira, somos casi hermano nunca te diría algo malo ni te defraudare- mientras decía esas palabras él me daba un abrazo muy fuerte.
Mientras Fernando me tenía entre sus brazos, mi determinación hizo que le creyera sus lindas palabras - ya, Feña, estoy confundido con alguien, osea siento cosas por alguien-
-Oooh, wena, bacan, te felicito -Decía mientras me abrazaba - y quien es la afortunada?- Preguntó super emocionado, ya que no estaría solo o como un otaku forever alone.
-E… eres tú, Fernando- cuándo se lo dije se me quitó un peso que tenía en sobre mi y me sentía tan feliz porque el ya me había dicho que no me diría nada malo.
- Que onda Andy?- Su cara era de enojo, ya que creía que lo que le estaba diciendo era una broma de mal gusto -Yo tambien te quiero y mucho, pero como amigo nada más- Esas fueron las últimas palabras que dijo educadamente.
-Feña, es verdad, estoy super confundido contigo, no se que me sucede, pero cuando te veo mi corazón se acelera,mis pulmones se llenan de oxígeno- le decía mientras mis lagrimas salian sin contención.
-Sale de aquí maricón de a peso, somos hombres y como tal nos tienen que gustar las mujeres- esas palabras me hicieron una herida muy profunda en mi corazón -y si no lo sabias a mi me dan asco los maricones como tu, no se como no me di cuenta antes- después de esas palabras salió de mi casa y yo quede ahi en el living llorando como un triste weon.
Estuve llorando por más de media hora en el sillón y el shock estaba desapareciendo, y me di cuenta que todo había sido real, lo que me quedaba ahora era preguntarle porque, que onda, si se supone que eramos amigos y los amigos se apoyan en todo en las buenas y en las malas, tomé mi teléfono marque su número y lo llamé.
Conversación telefónica
-Qué quieres ahora?- Dijo con su voz natural, como si todo lo que había pasado solo me afectase a mi no mas.
-Ne… necesito hablar contigo- Le dije, aun sabiendo que me mandaría a la cresta otra vez pero tenía que intentarlo.
-Andy, por el poco cariño que te sigo teniendo, por tu bien psicologico, te sugiero que no me busques mas- en ese momento mis lagrimas comenzaron a salir -A mi los maricones me dan asco-
-Si eso es verdad, porque hace dos años nos dimos ese beso?- Le reproche inconscientemente
-Eso fue hace mucho tiempo, además ese beso fue para un premio en el evento, nada más, entiéndelo a mi me gustan las mujeres- Ahora si mi corazón se destruyó más de lo que estaba hace poco.
Fin Conversación telefónica

CONTINUARÁ…
COMO DIJE EN AL INICIAR EL RELATO, SI ESTO SE HACÍA MUY EXTENSO LO IBA A CORTAR, ASÍ QUE EN OTRA OPORTUNIDAD VOLVERÉ CON LA PARTE FINAL

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