miércoles, 29 de abril de 2015

El Pato y yo 2

Al otro día desperté sintiendo golpeteos en la puerta. Era el Benja (uno de los weones que se había quedado a dormir), medio dormido y con el sendo hachazo, miré la hora; eran las 2:10. “Abran la puerta wn, que weá que le ponen pestillo”. Chucha pensé yo y agradecí que el Pato se hubiese escurrido la noche anterior, en ponerle seguro a la puerta. Estaba en pelota durmiendo con el pato, con la tura pará (típica mañanera). “Ya wn, espérate” dije y rápidamente me puse un bóxer y una polera, moví al pato y le dije que se vistiera. Le abrí; “que wea estaban haciendo wn, puro comiéndose los maricones jaja”, sonreí nerviosamente y le resté importancia. Los otros weones que se quedaron estaban levantados viendo que weá hacer para comer, así que ahí inventamos algo e hicimos un arroz con vienesas (Que por cierto quedó todo mazamorriento y asqueroso esa weá de arroz, ya que no lo hice yo) y almorzamos piola. Con el Pato normal, me impresionaba su naturalidad ¿O es que no se acordaba de nada :S?. Imposible, si despertamos en pelota juntos, nunca tan weón pensé yo.



Los otros weones se fueron a arreglar sus bolsos a sus casas un rato después de almorzar, pensé que el Pato se iría igual, pero se quedó. Igual me ponía nervioso, aparte que tenía la raja pa la cagá, aún me dolía, en realidad era como un descozor raro, no sé. La weá es que antes que se fuera el último weón me senté en el patio y me prendí un cigarrito. “Chao Camilo wn, que la pasi bien en las vacaciones, nos vemos a la vuelta” me dijo el Nacho (otro amigo) y escuché la puerta cerrarse y la reja de afuera abrirse. Fumé nerviosamente, por el hecho que Pato no se fuera y no dijera ná, llegó la hora de hablar pensé y antes que fuera a buscarlo, lo vi en la puerta acercarse. Se sentó al lado mío y me dice “puta hermano, quiero hablar de la wea de anoshe” con una voz como de arrepentimiento. No dije nada, sólo seguía fumando y él sigue; “Sabi que yo te quiero caleta wn, somoh amigoh hace poco y la wea, pero no casho que wea anoshe, la cague brigidamente, pero no quiero que pensi que soy maricon” Chucha, esa weá me partió el corazón, y me hizo angustiarme. “Me gustan las minah po wn, la vola de anoshe fue por copete, no se wn, pero puta olvidemoh la wea, no te pasi rolloh, yo te acepto como voh eri cero drama hermano, pero yo no soy como voh, no…” “¿Y cómo soy yo wn?” Pregunté algo enojado, aparte que me dolieron sus palabras, de alguna manera me ofendió. No soy como voh… es como que yo fuera no sé, un ser de otro mundo, un wn que vale callampa, así me sentí. “Maricón po hermano, no soy maricón, me gustan las mujeres, tetonas, culonas, ricah, sorry wn, no te pasi rolloh la dura, lo siento mah que la shusha, fueron volá del copete no mah”. Tuve que volver a prenderme otro cigarro, y seguía en silencio, meditando que weá decir, porque a pesar de todo estaba enamorado de él, porque de otra manera lo saco cagando de mi casa y no le hablo nunca más, pero no, a pesar de sus duras palabras, lo único que quería era mantenerlo aunque sea como amigo. “di algo Camilo por la shusha, puteame, eshame, pero di algo qlao”. Lo quedé mirando y le dije; “Sabi que wn, sí, soy maricon, me gusta el pico, anoche te lo dije, pero no te dije que lo único que quiero es volver a verte una vez más, porque estoy enamorado de ti… Sí wn, te amo más que la cresta, desde hace mucho, y sé que diciéndote esta weá me arriesgo a que te aleji de mí, pero pico wn. ¿Deci que no eri maricon? Pero lo más bien que voh empezaste la wea de anoche, y ahora te haci el wn. ¿Sabi quién es el más maricón aca? Tu wn, tu eri el maricon por tirar la piedra y esconder la mano…” No sé de donde saqué fuerzas para decir eso, fue un impulso y sentía húmedos los ojos, un nudo en la garganta, pero me aguanté como pude. “Puta hermano, no se que wea responderte…” dijo mientras bajaba la cabeza. “Nada po wn, que más me vai a decir, si ya dijiste todo… Y sabi que mejor ándate, voy a arreglar mis weas para irme a mi casa, de ahí hablamos” Seguía sin subir la mirada, sólo se levantó sin mirarme y dice “Noh vemoh hermano, que esti bien” y partió, mientras se alejaba le dije “no te preocupi pato, si esta wea queda acá no más” no dijo nada. Escuché que cerró la puerta, y automáticamente estallé en llanto (Si sé que soy un llorón culiao, pero pa que voy a mentir, si así fue la weá). Cuando me siento muy mal me da sueño (algo raro) y sumado al carrete de anoche, sólo atiné a tirarme en la cama y me quedé lona de una. Desperté como a las 9, porque sonaba mi cel, era mi mamá, no quise contestar y dejé la weá sonando, me fui a mojar la cara, tenía los ojos hinchados y me prendí un tabaco. Llamé a mi mamá (no quería que se preocupara) y hablamos las típicas cosas, que como estoy y eso. Le dije que no había sacado pasaje porque no sabía si tenía que dar examen o no (mentira, nunca le doy las fechas bien, para que no anden paqueando) y nos despedimos. Prendí el notebook y abrí el face con miedo… Dos mensajes, mi corazón saltó altiro, dije el pato me escribió, los vi por encima del icono de mensajes, ese que esta entremedio de las solitudes de amistades y las notificaciones (la típica para no dejar el visto)… Era uno de la mina que me joteaba, que no sé qué weá quería, porque solo pude ver qué final de 4 mensajes, había puesto un “<3” y otro mensaje de un weón dejando saludos. Puta la weá, me decepcioné, le sapié el face al pato un rato, con pena, y me fui a bañar pa relajarme. Me duché y toda esa weá, y cuando llego veo otro mensaje… lo vi por encima sin esperar nada, pero cuando veo que era de él, se me aceleró el corazón. Lo vi y después de varios mensajes (como 7, 8 algo así) terminaba con un “espero qe me contesti hermano”, no quería abrirlo, no quería dejar el visto, me lo había enviado hace unos minutos, demás estaba conectado aún, pero no me aguanté y lo vi. Entre todas sus faltas de ortografía, la esencia del mensaje era que lo sentía mucho, que quería hablar y aclarar todo. Pico pa él pensé, y le dejé el visto. “di alguna wea po” me llegó altiro otro mensaje, y le volví a dejar el visto y cerré el face. Pasaron los minutos y se me había quitado el sueño, fumé cigarro tras cigarro, pensaba y vagaba por los recuerdos, pensaba en todo. Ya eran como las 11 de la noche, seguía mal y fumando, ya me ardía la garganta… y escuché la puerta golpear. Sí, era él, quien más podría ser a esta hora… Admito que me puse feliz, pero igual tenía que mantener la dignidad. Le abrí “que querí wn, pensé que te habiai ido pa tu casa”, “no wn, quiero hablar con voh bien, no me puedo virar sin hablar con voh… traje unas chelitah pa conversar bien, pero déjame pasar sipo hermano que esta helao”. Lo dejé pasar, altiro botó su mochila y sacó una Becker. Igual hacía frío, era pleno invierno, pero le acepté la chela porque me ponía tenso hablar con él. Se veía tan rico si, andaba con unos pantalones pitillos rojos de esos bien cumas, que aparte le marcaban su bulto, y un polerón negro de adidas, flaite la weá, pero a ese flaite todo le asentaba. Traje dos vasos y él sirvió. Dimos un sorbo en silencio, y me quedo mirando con esos ojitos saltones y grandes. “Sorry hermano” dijo tímidamente “de verda sorry wn… quiero que me perdoni por aweonarme tanto” No dije nada, sólo di otro sorbo, tenía la mirada perdida, seguía mal y la verdad no sabía que decirle. “Yo te quiero hermano… y si te chanté ese beso… es porque te quiero qlao, es porque a pesar de todo, siento weás brigidas por voh, porque soy hetero, pero voh…. no se csm, voh me haci sentir otras weas por la shusha…!” Sólo lo quedé mirando, me alegré por dentro más que la rectm, pero mi rostro no lo demostró, había aprendido a disfrazar muchas cosas. Me estaba diciendo eso sobrio, y por sus ojos, se notaba que era de corazón, pero yo seguía entumido, observando mi vaso vacío y de vez en cuando su mirada que no se despegaba de mí. “me estai escuchando wn, di alguna wea”. “que te puedo decir, si en un día te conté todo de mí… y lo que siento por ti… está todo claro, depende de ti, porque no querí ser un maricón como yo…” respondí sin mirarlo. Se paró y rápidamente me dio un besito rico, que me hizo excitarme y estremecerme completo. Evidentemente el pico se me paró de una, reaccionando a ese beso tan caliente y húmedo, pero que no perdía su toque de ternura, mezclado de sentimientos amargos y tiernos, como dulce y salado a la vez, algo raro. “Ahora te quedó claro lo que digo wn… no estoy curao ahora qlao” Sólo respondí volviendo a acercar mi boca con la suya y juntarnos en otro beso caliente. Mis manos volaban solas metiéndolas debajo de ese polerón flaite,y palpando su trabajado abdomen, sus vellos me hacían sentir electricidad. Le manoseé su espalda, y de improviso le desabroché ese pantalón y mi mano se perdió en su tula. La tenía parada, se la toqué entera, jugaba con su cabecita, con sus testículos peludos, con sus muslos, todo mezclado con un beso. “me calenté hermano” y se bajó su pantalón rojo hasta las rodillas junto con su bóxer. No hubo necesidad de órdenes ni palabras, comprendí de súbito cual era mi tarea. Acerqué mi boca rápidamente y se la chupé… Como la noche anterior estaba medio curao, chupársela ahora me daba otra sensación, no menos placentera, pero si la sensación de estar cuerdo al 100%. Lentamente deslizaba mis labios hasta su base, sintiendo sus vellos. Admito que no la chupaba bien (comparado con la experiencia que tengo ahora), pero a él le gustaba porque yo miraba para arriba, y estaba con los ojos cerrados y la boca entreabierta disfrutando. Seguí chupándosela, la lamia, le metía la punta de la lengua por la uretra (el hoyito que tiene el pene en la punta pa que cachen), obviamente despacito, porque también soy hombre y sé que esa zona es sensible. Pero puta, disfrutar esa pichula era el cielo (aparte que era la única que había probado), me daba mucho placer tener su pene en mi boca, jugar con él, con sus cocos peludos, que ya se habían encogido de la excitación. Tocar sus piernas duras, velludas que me excitaban tanto. Él solo gemía, y yo seguía mamándosela. Ya con ese nivel de lujuria, me desabroché el pantalón y saque mi pico, y empecé a pajearme sin dejar de chuparla. “oh hermano, la wea rica csm” se quejaba, y yo disfrutaba aún más mi tarea. De repente, de improviso, me hace pararme y me da un beso, para luego susurrarme al oído “deja ponértelo… otra vez”. Me estremeció sentir su aliento en mi oreja, y tenerlo pegado a mí, tan rico que es. Sé que sonará matapasiones, pero evidentemente le dije que no…. “No wn, todavía me duele por lo de anoche, démosle así no más”, “puta hermano, quiero ponértelo, teni hoyo entero apretado, mejor que un shoro”. Admito que me calenté, pero no podía, todavía me ardía la raja y me dio miedo, así que no dije nada y solo bajé a seguírsela chupando. Le di por unos segundos y le dije “te sigo chupando el pico y te veni donde querai”, “ya bakan” me dijo entrecortado, por los quejidos que le provocaba mi mamada inexperta. Igual disfrutaba tener su pene caliente a mi disposición, les juro que a veces me alejaba un poquito para mirarle todo su sexo, y excitarme de verle la penca parada y peluda, toda babeada por mí, sus muslos fuertes y blanquitos, también con pelos (eso es lo que más me gustan de los hombres por si no se han dado cuenta jaja, los pelos), y seguía con mi trabajo oral. No sé cuánto tiempo pasó, porque en esas circunstancias nadie cuenta el tiempo, sólo siento que él se empieza a quejar más y caché que iba a eyacular. Hice un ademán de sacarme el pene de mi boca, pero él me tomo de la cabeza y me hundió más, así que entendí rápido; quería moquearme la boca. Nunca había tragado semen (ni el mío propio), pero de la pura calentura no la pensé mucho y seguí mamándosela, hasta que él da unos quejidos fuertes y graves, y me la mete toda y se vino. Sentí como el semen saltaba lejos dentro de mí y lo tragaba sin dificultad. Siendo sincero, no eyaculó en gran cantidad, pero tampoco demasiado poco. Lo normal supongo. Me la dejo metida, mientras se seguía sacudiendo en sus espasmos, la movió un poco y la sacó. Los restos de semen que me quedaron dentro, me sirvieron para tomarle el sabor, era un poco ácido, como agrio, pero no me dio asco ni tampoco goce (el sabor), obviamente de la calentura si me dio goce jaja. Acto seguido, me empecé a masturbar y como ya estaba a full, no demoré nada en eyacular. Puse la mano, no quería moquear la mesa de centro, y quede con la palma llena de leche…

La pichula del pato ya empezaba a perder potencia cuando él se subió los calzoncillos y el pantalón. Se sentó en el sillón y comenzó a llenar su vaso y el mío con cerveza sin decir nada. Me pasó el vaso y antes que alcanzara a dar un sorbo, él ya se había tomado al seco la chela de su vaso. “la chupai entero de rico hermano” fue su comentario fugaz, yo me sentí como una puta (típica esa weá que pasa a veces, que después de eyacular te da como un remordimiento, algo raro en nosotros los hombres). Sólo le quede mirando, y me dice “te quiero wn, no te enoji, ahora te demostre que lo de ayer no fue una wea…” Que tierno wn, me levanté y lo abracé apretado, sentía su perfume fuerte que me volvía loco. Estuvimos varios segundos abrazados y le susurré al oído “te amo más que la chucha patricio” y me dio un piquito. Nos volvimos a sentar, y sacó de la mochila otra cerveza, la abrió y se volvió a llenar su vaso y a rellenar el mío (no me la había tomado toda aún). “durmamos juntos aquí en tu casa wn? Hace cualquier frio, y nos damos calorsito humano” me preguntó mirándome fijo con sus ojos saltones, tan bonitos. “vale wn, tomémonos esa chela y nos vamos al sobre”. Dicho y hecho, nos terminamos de tomar la Becker, y fuimos pa mi pieza. No íbamos a dormir en pelota evidentemente, hacía un frío de esos que te llegan a helar los huesos, y yo soy especialmente friolento. La noche anterior sí, pero porque el estar curao me daba calor jaja. Se sacó el polerón y le vi con una polera blanca de algodón, que lo hacía verse más rico aún, era como apretadita que le marcaba delicadamente su figura trabajada. Se sacó también sus pitillos rojos y las zapatillas. Yo lo imité, y quede en pura polera y bóxer y nos acostamos. Que era rico dormir en cucharita con él estando sobrio, juntar mis piernas con las suyas, rodearle sus músculos con mis brazos y sentir el olor a champú en su pelo. Realmente era la gloria. No hicimos nada esa noche, aparte de manosearle un poco la pichula. Estábamos cansados, por el carrete y por la chupá de pico que le di. Nos quedamos dormidos, y mis últimos pensamientos fueron para él. Mi Pato, mi flaite rico…

Desperté y lo vi al lado mío, durmiendo tranquilo todo doblado, tan lindo que se veía y mis ojos se llenaron de amor por ese flaite que tenía en mi cama. Me dispuse a levantarme y fue inevitable despertarlo. “que hora eh wn” me dijo medio dormido, “no sé wn, espérate y veo en el teléfono… son 10 para las 12” le dije y agregué “me voy a bañar pa hacer algo para comer”, “calmao hermano, me levanto al toque y nos bañamos juntoh po”, de un salto se paró y se estiró, pude contemplar que su bóxer estaba levantado, la típica mañanera… “con la media pishula que desperté hermano, teni que bajarmela” “vamos a bañarnos wn jaja” le dije y fuimos al baño, nos desnudamos, aún seguía con su pene como fierro y de verlo se me paró a mí también. Nos metimos al agua, y empezamos a hacernos cariñitos… “toavia no podi culiar?” me dice así todo caliente. A pesar de que se me había quitado un poco la weá del culo, le dije que no. “pero te la puedochupar po, eso hacemos los maricones o no?” le dije eso aludiendo a la weá que me había dicho ayer. Pensé que se iba a incomodar, pero lejos de eso me dice; “ya bakan dale no mah hermano”, así que se la tuve que chupar no más po, yo enojado jaja. Se la chupe y otra vez me eyaculó en la boca, parece que le gustaba esa weá. Nos salimos y nos vestimos e hicimos almuerzo. En realidad cociné yo, porque ese weón es un cero a la izquierda cocinando. Pelé unas papas e hice un puré con un pollito que tenía en refri, ese lo hice a la plancha, y para que estamos con weás, me quedó la raja. “puta que cocinai rico qlao, teni manoh de angel hermano jajaja” su risa hacía resaltar más sus ojitos saltones y eso me gustaba mucho, yo sólo me reí y tiré una que otra talla y comimos.

“y tú no te pensai ir a tu casa” le dije mientras lavaba las weás que usamos para almorzar. “me estai eshando camilo wn, puta que te poni mar… mal amigo jaja” Maricón iba a decir jaja, ya a estas alturas, no me ofendía que me dijera “maricón” en contexto de weveo, pero parece que él no se daba cuenta. “ibai a decir maricón? Jajaj dilo no mas aweonao, para que le poni color conchetumadre jaja” Le dije así tal cual, a lo que él se rió caleta y yo también. “shiaa pero pa que po, pa que tan shorizo perquin reqlao” y yo me cagaba de la risa, nos seguimos puteando en broma, pero le volví a preguntar lo mismo de que si no se pensaba ir, que estábamos de vacaciones y esas weás. “pero de verdad queri que me vaya wn?”, me preguntó eso y sentí que el sintió que lo estaba echando, y en realidad parecía eso. “wn no te estoy echando, si sabi que quiero que estés aquí, conmigo. Pero para saber no más po”, “ no pasa hermano, te molesta si me quedo unos días contigo aca? O voh queri viajar pa tu casa luego?”. La pregunta aweoná, si sabía que lo único que quería era estar con él, acá solos. “no wn, quedémonos unos días, llamo a mi vieja y le digo que tengo unas weás que hacer no más y listo” “ya bakan hermanito, la vamoh a pasar bien, calmao no mah”. Que me gustaba ese “hermano” y ese “calmao”, era como tan flaite, que me prendía jaja.

Así que nos quedamos más días po, pero como ya me estoy alargando mucho jaja, en la próxima entrega les cuento que pasó esos días, y que pasó los meses posteriores con mi Patito.

Saludos a todos, atte. Camilo.

Primera parte: http://relatosflaitecitos.blogspot.com/2015/04/el-pato-y-yo-1.html
Segunda parte: http://relatosflaitecitos.blogspot.com/2015/04/el-pato-y-yo-2.html
Tercera parte: http://relatosflaitecitos.blogspot.com/2015/04/el-pato-y-yo-3.html

14 comentarios:

  1. Buenisimo, y me encanta esa parte de la mañana cuando amaneces con una gran ereccion :$

    ResponderBorrar
  2. Excelente relato, muy real por todos los detalles, lo que te dice el, lo que sientes tu, ahora a esperar hasta mayo, falta tanto :(

    ResponderBorrar
  3. Bakan..la segunda parte, me emociona!!
    Curico

    ResponderBorrar
  4. Muy buen relato! Felicitaciones Camilo, espero la siguiente historia! Saludos! Curikno

    ResponderBorrar
  5. en la primera parte del realto cuando te dice q no es maricon y qlo de anoche fue un error me dio rabia, todos los heteros con ese maldito remordimiento, me dan rabia, si unq esten curaos saben lo q haces xD.

    x otro lado tu relato sigue siendo genial.
    felicitaciones
    saludos desde la sexta region

    hen

    ResponderBorrar
  6. Wn tu historia me tiene maaaal, nostalgia a.full jeejej me recuerda a mi historia con mi flaite, las mismas palabras y los juegos que hacíamos de pelear jeje... Buena historia Camilo aunque me llena de nostalgia U.u

    ResponderBorrar
  7. Está la raja tu historia Camilo, realmente es un agrado leerte. Puta sueño con que me culle un flaite :'(

    ResponderBorrar
  8. CSM que bkn este relato! xd me siento como cercano xd

    ResponderBorrar
  9. Super buenos tus relatos, lo único que no me gusta es que sea tan desconsiderado contigo el weón y ni te corra una paja siquiera, espero que con el tiempo se haya soltado más :) espero la siguiente parte

    ResponderBorrar
  10. Muy bueno el relato, ojalá que no se haya arrepentido de lo que hicieron (espero que sigan juntos), espero luego la tercera parte

    ResponderBorrar