domingo, 31 de enero de 2016

El Flaite colorinche

Hola!! La verdad es que no soy muy bueno escribiendo, así que espero que cumpla las expectativas de ustedes.

Resulta que hace como un mes tenía que juntarme con una amiga de La Ligua , la cual venía a Santiago a un curso por el día, así que concordamos juntarnos en el terminal San Borja para tomarnos algún juguito piola y conversar rapidito. Yo estaba tranquilamente sentado frente al carrusel esperando que llegara la susodicha, cuando aparece caminando frente a mí un flaite de mi edad (30 años), y si bien no era un mino sensacional como muchos describen en sus relatos, este weón me calenó y me calentó mucho… él tenía un “no se qué” y además me causó gracia que andaba vestido tan colorinche, onda con pantalones azules, camisa naranja y lentes verdes. El tipo era trigueño, debe haber medido 1,75 mt., delgado, con su típica caminada flaite, que no sabes si está caminando o meneándose malosamente. Me quedé viéndolo todo el momento que pasó frente a mí, hasta perder su rastro. Me dejó caliente el weoncito, tengo que admitirlo y a pesar de ser un weón común y corriente, dentro de mi mente ya le abría esa camisa naranja y pasaba mi lengüita por sus tetillas, agarrando su bultito y sintiendo ese rico pico colocándose durito poco a poco entre mis manos. Pero ya!!! Mi fantasía se esfumó cuando llegó mi amiga y así nos fuimos a beber algo, mientras hablábamos de la vida.

Después de haber pasado un agradable momento con esta niña, y como veo que aún era temprano, me entra la maldad y me voy al baño del terminal, ese que está en el segundo piso, junto al patio de comidas. Hace años cobraban para entrar, pero desde que es gratis, dicen las malas lenguas que a veces hay weveo, y weveo del rico. Entré como que no quiere la cosa y quedé petrificado cuando veo que en los urinales, de espalda a mí, estaba el weoncito colorinche que me calentó hasta el fondo del callampón!!! Uhh!!! No lo pensé ni dos veces cuando me puse en el urinario de al lado, para intentar verle la pichulita, que seguro la tenía muy rica. Saqué lo mío y comencé a hacer como si estaba orinando, mientras miraba de reojo a este weón, que para mi sorpresa, se estaba masturbando!!! Ohh csm!! Eso me dejó de piedra literalmente. Se me paró al instante, y comencé a seguirle el juego, masturbándome de a poquito, haciéndome para atrás para que viera mi cabecita que ya estaba rojita solamente por él. El mino tenía una verguita no tan grande, pero sí muy gruesa y negrita… con una cabecita que en mi mente ya estaba dentro de mi boca, bombeándome salvajemente. No sé cuánto rato, estuvimos así los dos, pero él mientras me veía masturbarme, más se pajeaba, más dura tenía la callampa y yo sentía que iba a explotar en cualquier momento. De pronto se puso junto a nosotros otro weón y también comenzó a seguir el jueguito con nosotros, pero no sé… me puse nervioso, así que me subí el cierre rápidamente, me lavé las manos y salí del baño, pensando después que quizás debí haberme quedado. No alcancé a dar ni tres pasos fuera del baño, cuando siento una mano en mi hombro y era el weón colorinche!!! Sólo atiné a decirle hola!, cuando él me dice, con voz media tarzanesca, “tengo un lugar al frente, sígueme!”. Sin decir ninguna palabra, asintiendo con la cabeza, seguí al weoncito, bajando al primer nivel del mall Plaza Estación.

Fue todo como raro, porque ninguno de los dos decía palabra alguna y ni siquiera íbamos juntos, era yo quien lo seguía como desesperado por tocar por todos lados al weón. Salimos por Francisco de Borja y cruzamos hasta entrar a una especie de terminal de trabajadores de Pullman bus, y ahí me detuve, porque no sabía en qué me estaba metiendo. El weón se detuvo, fue donde mí y me dice… sígueme poh!!!!, como si fuese una orden jajaja. Usualmente no soy sumiso, pero sin decir palabra alguna, sin saber su nombre, lo seguí. Entramos al lugar, y él se fue junto a mí, saludando a un par de tipos, dando a entender que yo iba con él y que quizás éramos amigos, qué se yo. De pronto saca una llave y abre una puerta que era de un cuartucho ultra pequeño, con dos camarotes, con un olor a encierro que te lo encargo, que entraba muy poca luz. No alcancé a hacer ni decir nada, cuando el weón se abalanza sobre mí, me tira contra la pared y me planta un beso súper salvaje, metiendo su lengua hasta lo más profundo de mi garganta, pillándome absolutamente por sorpresa. En ese momento yo me volví loco también. Sin parar de besarnos apasionadamente, comencé a desabotonar esa camisa naranja que tanto quería ver en el suelo, y comencé a bajar por el cuellito del weón… por su pecho, sus tetillas que estaban duritas, muy duritas con mi lengua pasando por ellas. El weón gemía muy despacito, ronquito y eso más me calentaba. Seguí bajando, abriéndole el pantalón y al fin chupar ese rico pico… ufff!! Estaba realmente desesperado chupando esa callampa tan dura. Le chupaba todo, la cabecita, el tronquito, los coquitos peluditos que tenía… muy muy rico!!! La respiración del weón se entrecortaba y ponía su mano en mi nuca para que le chupara más y más. Ya cuando sentí que quizás él iba a acabar, porque que estaba respirando demasiado acelerado, me levantó bruscamente, se puso de cuclillas y comenzó a hacerme una de las mejores mamadas que me han hecho. Se metía mi verga durita y cabezona hasta lo profundo de su garganta, masajeando mis coquitos con su mano… ufff!! Ya no daba más de placer, él chupaba y chupaba, su lengüita jugaba con mi cabecita, lo chupaba como un profesional y yo no daba más… era demasiado el placer que sentía, así que le dije que iba a acabar, con la intención de acabar dentro de su boquita, lo cual es una de las cosas que más me gustan, pero no… el weón se levantó, me abrazó por el lado y comenzó a pajearse junto a mí. Ambos pajeándonos, besándonos apasionadamente, con nuestras lengüitas jugando bruscamente, y uffff hasta que acabamos casi al mismo tiempo. Qué orgasmo weón!!! Como soy medio gritón cuando acabo, el weón solo atinó a decir, shh!!! Hay gente afuera!!!! Así que la tuve que hacer más piola. Ya acabados ambos, nos limpiamos, nos subimos los pantalones y el weón me dice ‘’te voy a dejarte afuera, despídete piola si poh!!”. Salimos del lugar, entre buses y auxiliares, y me dice: Un gusto po compadre!!! Nos vemos pa la próxima!!! Y tras un apretón de manos, y una palmada en la espada, me alejé… sin nunca saber el nombre del weoncito, ni whatsapp, ni nada… pero qué más da??!!! Tuve una excelente sesión de pajitas y mamadas con un flaitecito colorinche, solamente necesitaba una ducha fría.

5 comentarios:

  1. cual es el baño del segundo piso no lo cacho :(

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  2. Que rico relato wn!!! Ya po, da mas detalles donde está ese baño de weveo... sigue escribiendo!!

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    1. Weon es ir al patio de comidas de estación central y te topas con ese baño xd

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    2. hay 2 patios de comidas al lado de paris y el del lado de happyland xd

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  3. En la primera parte se nota que eres de los maricones fuertes, se me quitó toda la calentura

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