lunes, 4 de mayo de 2015

Liceo nuevo 4 y final

“¡Oh, la tortura del primer amor, de la primera desilusión! ¡Cuando se lucha con el pasado, en lugar de olvidarlo! Así persistía yo antes en tender mi pecho blando, a los mismo recuerdos, a las mismas iras, a los mismos duelos.”
— María Luisa Bombal
Aquel fin de semana unimos nuestras almas y nos hicimos uno. Calmé las lágrimas de Daniel como pude. Sabía que sufría, que en el fondo no era más que un machito recio buscando aceptación, amor y calor. Lo que siguió los meses siguientes erase una historia digna de retratar. Amor. Amor. Amor.

¡Ay, heme aquí
Deseándote en
sonidos diáfanos!

- Su partida fue sin duda la época más desordenada y dispersa de mi vida. Madre, al llegar a casa, me esperaba con la madre de Tomás. Quien por mi culpa atravesaba una depresión y blabla… yo, ya no lo amaba. Más que mentirme no podía. Deseaba a mi Anuarí. Aquella noche conté a mi madre que enamorado de otro muchacho estaba, la historia le pareció conmovedora. Pero también quería que volviera con Tomás, pues las familias se conocían de hace mucho y blabla. ¡Qué cómo había dejado a Tomás, un niño de familia, por.. ése otro. Madre, al conocer a Daniel, no lo pudo creer. Me sentía como la familia de los Capuletos odiando a los Montescos en Romeo y Julieta de mi gran y amado Shakespeare. Pero en el fondo, mi madre, sabía que era un pendejo y que tenía que enamorarme de quien sea aunque ella estuviese en contra. Me aceptó. Al final de todo, madre me dijo; viste, yo lo sabía, te dejó. Pero yo no quería que eso pasase. La fortuna de sabérmelo durante un año y medio en mi vida había calado todo en mi. Los meses siguientes fueron intensos, paseos en la playa, besos con vapor por el frío del invierno, despertares calientes, posiciones para perder el frío, le di mi sexo entero, destilé amor por él.
Recuerdo aquella tardecita de invierno cuando encontramos esa casita abandonada en el umbral de una pampa. Me dijiste, entremos, vamos, no seais miedoso. Aun recuerdo la forma en cómo tus ojitos miel me miraron y la forma en que dulcemente me llevaste de la mano. Entramos, y escombros. Al cabo de unos minutos ya tenías mañosamente subiendo tus dedos por mi espalda. Recuerdo. Aquel día era el de mi cumpleaños y Daniel supo prepararme una sorpresita nueva, innovadora y pasional. Hubo llenado de girasoles una pared entera de aquel lugar, al final del pasillo se escondía una pieza –la más pequeña– casi a un metro de llegar me abraza de la espalda y tapa mis ojos, sus manos con ese olor tercamente varonil impregnaron mi olfato con su nombre. Estaba completamente enamorado de él, yo sé que si. Yapo, principito, no te movai tanto viste que la sorprais se echa a perder. Ya, ahora sí. Te amoo, feli cumple principito lindo. Un vislumbre me hizo enternecer la vista, logré llevar mis manos a mis ojos para despertar del sueño pero afortunadamente era real. Una pared con diez girasoles tiernamente adornados. Una mesita que hubo traído desde su casa hasta aquel lugar para dejar en ella una cajita de cartón de unos 10 centímetros, caminé hacia ella, Anuarí me miraba afirmado entre la madera añejada. Al abrirla me encuentro con dos fotos, un libro, y una carta tiernamente escrita por él. Mira, es que él, ese po, él es mi taita, murió en la dictadura, fue preso político, ésta es la única fotito que tengo de él. Y cacha, cacha, éste soy yo po –sus margaritas florecían nuevamente– ya, si sé que es un regalo aweonao, pero es simbólico, viste que mi taita y yo de chicos éramos igualitos (lo eran) y éste.. principito po, éste es el librito que me leía mi tía, es pa usté. Y los girasoles.. weno, cuando fuimos pa su casa vi que tenía en su pieza un florerito con tres girasoles, y las veces que he ido siempre hay diferentes, supuse que le gustaban pu. Su mirada era sincera, sus labios secos al hablar tímidamente de cada presente que me había obsequiado me hicieron mojarlos con mis labios llorosos, enceguecidos por él, ganosos de su tacto. Me hizo el amor. Me tomó como un niño y me subió tímidamente a la mesita. Besó mi cuerpo tanto como pudo, yo me dejaba querer pero en el fondo tampoco sabía qué hacer, estaba conmocionado, ido, no sabía reaccionar ante aquella situación, eran muchas emociones y todas emanaban teamo y nomeolvides. Me abrazó tiernamente y pude sentir su olor entero, ese olor quejoso a martirios pasados, ese olor a hombre, me cubrí como pude entre medio de su felpudo pecho, me hice un hueco entre su axila donde me cobijé para siempre. La excitación se me hacía notar entre mis poros, mi cuerpo pedía a gritos su cuerpo, quería que entrase en mí su sexo entero y nunca acabase ese momento. Pedazos de su cuerpo aún viven en mí. Fue una envestida envolvente, me hizo el amor mientras respiraba yo su aliento y mis manos locas jugaban con su trasero hermosamente hecho por el Olimpo y sus piernas fibrosas. Siempre adoré que su pecho fuese cubierto de follaje negro, emanaban un olor ultratumba, y al sentirlos entre mi espalda descalza un dejo de mis adentros emanaba un orgasmo único. Nuestros cuerpos eran inmarcesibles y yo ansioso esperaba la efervescencia de su líquido dentro de mi cuerpo. Quería darle el cielo, la aurora de una mañanita tenue, todo para Daniel. Nos cubría el arrebol de la tarde, le vi sus ojitos miel que habían cambiado de color a un rojo luminoso por el bajo del sol y la entrada de la noche.

“Te escribo cuando el reloj no me toca
y tengo la frescura de tus labios lizos
rozando los recuerdos que me aquejan,
te escribo cuando puedo, y agradezco
hayas llegado a mis pensamientos,
cambiarlos de dirección y llevarlos a ti.”
Me quedé tendido observándolo con tal limerencia que me parecía del todo atractivo. Mi hombre, mi sexo fue tuyo durante tanto. Me eras tan inefable. Daniel, tomaste mi alma y me dejaste ahí, ido, aquella tardecita.
Recapitulo, entonces, hasta el día que nos separamos. Los días continuaron así de románticos, luego de una cena, madre nos dejó celebrar en mi casa mis 17. Aquel último año decidí quedarme en el mismo liceo, ya nada me movía con la misma intensidad en el antiguo colegio de monjas (dónde también se encontraba Tomás) Ay. Aquel año Daniel fue completamente mío. Todos en el liceo sabían que éramos novios, o al menos, era un secreto muy a voces. Nos destacábamos en Artes, Historia y un taller opcional que tomamos los días viernes después de clases que consistía en literatura y lo hacía una poeta conocida del sur. Era todo muy hermoso, logramos llevar a cabo un taller de sexualidad en el colegio. Aquel año ya habían más de 20 niñas embarazadas en los cuartos medios (y aunque es muy normal que pase) es gracias a que no tenemos una educación que nos hable de sexualidad. Logramos aquel tallercito y publicar unos poemas varios míos. Daniel me pedía que le enseñe a pintar mejor al óleo y yo me nutría de sus clases de historia… Aquel año, recuerdo, un par de flaites (ricos igual) lograron hacerme una encerrona en los camerinos. Daniel, había ido por las llaves del gym puesto que era el encargado de dejar todo en orden. Recuerdo aquellas tardes dónde tendidos hacíamos el amor luego que todos se hubiesen ido. Aquel día, tres flaites (de otros cursos) lograron entrar a la fuerza a la salita. Les dije que se fueran, que ya estaba cerrado y uno de ellos logró notar mi caminar afeminado hasta mi bolso: ¡Este es weko! Dijo. Y como pudo se subió encima de mí tirándome al piso para golpearme. Mientras tanto los otros dos lo animaban y yo desesperado gritaba pidiendo ayuda. No sé cómo fue que pasó pero ahí estaba, mi héroe, golpeándolo con todas sus ganas. ¡qué te pasa maraco culiao, ahora estay weko igual Daniel, que volá loco! Sí po, estoy entero weko, pero eso no quiere decir ná que no me puedo defenderme a combos con vo, gilo culiao. Y aquellas palabras, más que emocionarme, me dieron alivio, los echó, se fueron… corrió con más fuerzas hasta dónde yo estaba. Ya mi principito lindo, mi amorcito, too está bien, vamos pal baño pa que te limpie la carita. Ya en el baño (solos) comenzamos a besarnos, le toqué su miembro que conocía perfectamente. Vamolo’ a la ducha, principito. Sí, le respondí. Un frío chorro de agua fría cubrió mi espalda y un orgasmo se depositó en su oreja, lo mismo hizo él y ya nos vimos erectos una vez más. Me besaba la herida (que me hizo el flaite) con sus labios gruesos, me sanaba cariñosamente y al oído me decía que era su culpa. Que lo disculpara por haber pasado a la cocina a buscar pancito donde la tía martita y weas. Abrázame, Daniel. No me sueltes. Y nuestros cuerpos se cohesionaban tan bien que le sabía ya todos sus lunares. Como pude logré agacharme y hundir mi boca dentro de su grueso ser. Lo masturbé con ganas infinitas y lo llevé a mis labios. Daniel desde arriba parece excitado, el cerrar de sus ojos me indican que está en un sueño. Continuo largos minutos haciendo mi mejor trabajo que cultivé ese tiempo que estuvimos juntos, chuparlo. En un impulso propio me sube entre sus caderas, me afirmo de la puertecita que cerraba la ducha para hacerla individual y la primera envestida me dolió un poco más, entre eso logré llegar a su boca que ganosa me esperaba. No te bají, principito, mi amorcito, erí enterito mío y más gemidos, más lengüetazos, más gritos en su boca, sus ojos en mis ojos, mi sexo dentro del suyo y un orgasmo que parecía no acabar nunca. Sentía, de pronto, como mi nalga clavada a su miembro hacía un choque magnético y plenamente libre. Me cubría mi espalda adolescente con sus largas manos morenas, sus dedos lograron llegar a mi sexo mientras me penetraba dulcemente. Un sonido excesivamente dulce, acalorado y lleno de pasión indicó el término de nuestra unión sexual. Nos seguimos duchando, me pasaba el jabón por el cuerpo, me tocaba y recitaba palabras lindas al oído. Siempre todo fue tan sutil, tan tenue y emotivo.
Recuerdo aquellos días cuando me obsesioné con los vampiros y leímos todos los libros de la saga Crepúsculo. También recuerdo sus detallitos para el día del conejo. Me dejaba pistas en aquella misma casita dónde hicimos el amor celebrando mi cumpleaños. La tragedia ya pronto tendría rostro. Aún no comprendo.
Una mañana, en clases de matemáticas, llega la inspectora. Se escuchaban las pifias escondidas de la Daniela con su grupito, un par de risas y Daniel, a dirección. Y el UhUhUh de todos logró sacar una carcajada nerviosa desde los adentros de él. Ya, silencio, decía la profesora que continuó con las tediosas ecuaciones en 3er grado. Ya era final de año, las clases no tenían sentido y nos soltaban antes. Bajé corriendo las escaleras y a la madre de Daniel la invadía un llanto de años, una pena que tenía guardada desde que su padre fue asesinado y de ahí en adelante su trágica vida. Me miró pero desvió como pudo la mirada. Quería ir hacia ella, calmarla y preguntarle qué había pasado con mi hombre, con el anhelo de mis días y la luz de mis ojos avellanos.
Por hurto en una sucursal bancaria, asalto a una ejecutiva del lugar y por 4 gramos de marihuana en su pieza. Al Daniel lo metieron preso weon, me decía una amiga de él. Fue una semana de caos, quería verlo, mi Anuarí yacía en una celda con un frío espantoso, siendo interrogado, juzgado y pensando mucho. Fui yo quien todo ese tiempo conoció todos los fantasmas que lo habitaban, la muerte siempre estuvo presente en él. Los meses continuaron sin Daniel. Pedí a mi padre lo pudiese ayudar como abogado, pero éste dijo que ya no había nada que hacer y sólo esperar la sentencia, que fue de 4 años…
No pretendo hondar más en el tema. Logre ir una vez a su encuentro. Lo recuerdo tan híbrido. Me revisaron el cuerpo entero, no pude evitar sentirme manoseado y recordar aquella vez que Tomás se posó encima mío para sentirme suyo. Yo ya me iba de mi ciudad a estudiar Artes lejos de ahí. Quería despedirme de quien hizo de mí un hombre. Desafortunadamente no quiso verme. La idea le parecía terrible, yo creo. Daniel ya no tenía más versos que le hablen sobre la vida bella. Los años han pasado y aún recuerdo sus besos de sobremesa. Sus margaritas rufianas besándome la cara, la forma en que la comisura de sus labios se fruncía cada vez que me decía teamo.
Me gustaba tanto el roce de sus piernas. Sus manos cálidas tocando mi rostro por el frío del invierno, sus ojos al dormir, la forma en que reía cuando cometía algún error.
Me gustaba todo de él. Recuerdo su primer beso y también el último. Sus manos acariciando las mías y también la última vez que las rozó para despedirse.
Su caminar tan sereno y delicado
como la esencia que lo hacía mejor persona.
Todo de él, desde su nombre hasta su sexo.
Todo de él, desde su amor hasta su odio.
El día quema horas, minutos y recuerdos…
FIN


31 comentarios:

  1. Es que no puede ser :c esto es atros, me hizo llorar u.u uno de los mejores relatos ! Espero algún día puedan reencontrarse...

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  2. dios mio, dios mio, dios mio no se si esta historia sea cierta o no, pero wn que terrible, estoy anonadado...

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  3. ooh la weá siútica, ordinaria y pretenciosa.

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    1. Evidentemente usted no sabe el significado de la palabra siútico. Ordinario es que hagas un comentario anónimo y ¿Qué te importa a ti si la historia es pretenciosa? por lo menos tuvo el ánimo de escribir.

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  4. creo que si lo hubieras contado pero no de forma taaaaan mamona y poetica hubiera sido un buen relato ...pero pff demiasdo corin tellado

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  5. creo que es tan buena que llega a ser mala sin que se malentienda la historia esta muy bien redactada pero no se se pierde como la sensación de las historias de la pagina creo que pasa a ser como un relato fuera de esta pagina así como franco y borja ; pd . es mi humilde opinión aceptando que a mas de uno no le guste

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  6. weón en serio qué pena, sentí toda la angustia de tu relato... :(
    fue tan abrupto todo, ni siquiera tuvieron una conversación después de eso... wow, que triste u.u

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  7. Tres cosas... en lo personal no me gusto el lenguaje ke usaste - weno, los gustos son subjetivos - segundo, si le dieron 4 años es raro ke los cumpla con carcel efectiva y finalmente, el delito de hurto es mas pacifico ke el de robo... si se enfrento a una ejecutiva del banco, debio ser robo de seguro. No se si la historia es real, pero si la vendes como tal, todo esto me hace ruido al momento de creernelo. Saludos

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  8. Hace tiempo esperaba la continuación de esta historia! Pensé que tenia un final feliz, pero Daniel ya decía q no era bueno! Ojalá se encuentren algún día! :( Saludos CuriKno

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  9. No terminé de leer la historia porque el lenguaje usado una lata... me llego a dar risa las pretensiones del escritor jajaajaj mejor esperaré hasta el de mañana.

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  10. que onda jaja vengo acá a leer relatos calentones de flaites y me encuentro con esta mierda. Penca que trates de contar algo en un lenguaje y estilo que no es el tuyo, mejor escribelo en tu pascualina

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  11. no alcancé a leer ni 2 minutos y me aburrí. Latero, demasiado mamón, demasiado eufemismo para decir lo mismo. Quizás te equivocaste de blog, porque para leer atados ajenos mejor leo el diario o alguna otra porquería.

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  12. primer relato que me da sueño leer, donde quedaron los buenos relatos en este blog!!!!!

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  13. me da lo mismo si es real o no la historia, pero creo sinceramente que tienes un potencial como escritor y este relato me llego caleta y me hizo sentir cada uno de los sentimientos que describías. si llegase a ser real espero que esa pasión y ese amor logre encontrar a alguien en quien posarse y se convierta en un girasol:D o quien sabe la vida tiene muchas vueltas y el mundo es muuy pequeño y puede que te reencuentres con el.
    suerte en todo saludos

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  14. NOOOO llore toda la puta noche :'( mierda me llego al alma Mi nombre es seba Y apartir del 20 de mayo relatare mis historias.asi que preparence :')

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  15. Que pena :c , en verdad.
    Creo que esta serie de relatos no está orientada (como las otras) a calentarse, sino que mas bien trata el tema de los sentimientos desde una muy buena perspectiva.

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  16. Y cuantos años lleva en la carcel ? No lo volviste a ver ? Esta es una d esas historias k uno kiciera k no acabaran en dos sentidos , en k siguieras cntando y en k los protagonistas siguiecen juntos ,saludos y muy buena historia.
    P.D. ojala respondas las preguntas , cuidate

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  17. Una de las mejores historias, sin duda feliz de leer algo asi. Si es real ojala algun dia se encuentren y si no, creeme la senti como si lo fuera. Cariños:D

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  18. Demasiado rococó para mi gusto... Sorry pero me cargó, por suerte era la cuarta parte y FINAL.

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  19. Quedé sumamente conmovido. Gracias por los hermosos relatos. <3

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    1. Que bueno que tomaste en cuenta los comentarios buenos, porque realmente estas weonas son mariconas pa responder... Bueno, te agradezco por el excelente relato, conmovedor, romántico y apasionad. Muy bueno, te felicito, espero que te hayas reencontrado con tú anuari

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  20. pucha...que pena eso que paso, ojala el destino los vuelva a unir, son el uno para el otro, se merecen una nueva oportunidad, y creo que podrias escribir un libro de esto, tienes el talento de escribir, y tu historia hubiera sido foma sin esa poesia que colocar de por medio, escribe y difunde este relato, la gente merese deleitarse con esta historia llena de emocion y sentimiento.

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  21. Hola, chicos. Soy el autor de estas cuatro obras. La verdad estoy muy emocionado por sus palabras. Las críticas son siempre bien recibidas;más en el arte, no todo relato llega de la misma forma al receptor. Les cuento, ésta es una investigación que vengo haciendo mucho tiempo para un ramo. Estudio letras. La cosa era llegar a conmover (desde distintos puntos de vista positiva/negativamente) y creo que lo logré. Me tiene muy satisfecho todo.
    Y, a veces, la ficción puede verse como la realidad misma. El poder de escribir es ese. Transmitir un espacio/momento/intensidad desde cualquier lugar.
    Héctor.

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    1. O sea q era todo parte de tu imaginacion???

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    2. Gracias por darmos tus relatos , los disfrute mucho y senti cada palabra , el ultimo m costo un poco entenderlo pork fue muy poetico pero no malo , aora leyendo tus palabras m keda una duda , esta saga d relatos es real ?? , saludos y cuidate

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    3. Queee, no era real? Estoy con tragedia

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  22. ¿Anuarí? Qué chucha! XD no pudiste elegir un sobrenombre más amariconao...

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  23. Wn tu historia es la raja!! Calidad a mil y al final parecía ya un libro, jejej aunque parezca sacada de un libro por la excelente redacción me hizo estremecer varias veces, sea verdad o mentira hace sentir muchas cosas y se puede apreciar un erotismo más bonito y con significado. Linda la historia y gracias por la dedicaciódedicación.

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  24. Leí esto me lllego pero amigo en tu lugar hubieseluchado por el, por que si realmwnte lo quieres lo hubieses hecho da lo mismo quien fuera como persona, si puedes buscarlo ahora hazlo lucha pir tu gran amor haz lo que seas espero quw me escuches y dsp no te arrepientes pero lucha por persona da lo mismo todo solo lucha ya Chao lo

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  25. Leí este relato hace meses, lo encontré genial, me encantó todo, la redacción, el estilo de mezclar los diálogos, lo poético y lo descriptivo, sinceramente uno de los mejorew relatos de esta página. Esta noche me acordé de este relato y lo leí completo nuevamente, y me hizo sentir todo de nuevo e imaginarme las situaciones, y aun muchacho diciendo tiernamente 'principito'. Una de las hostorias que no me cansaría de leer. Felicitaciones al autor, un gran talento en su escritura. Y si bien fue publicado hace mucho, no se si el autor lo habrá continuado o si habrá en algún sitio algo más de esta historia. Nada más, fascinante.

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